Revista otoñal de tropas
Desde agosto ya circulaba información sobre el desfile. A diferencia del secreto y el halo de misterio que rodearon el desfile del 70.º aniversario hace diez años, este año la comunicación pareció mucho más proactiva: campos de entrenamiento empapados de sudor, equipo individual impecable; todo tipo de contenidos sobre la revista se difundían por las redes sociales. Solo cuando comenzó el desfile oficial quedó claro que lo divulgado era apenas una pequeña parte de la gran ceremonia. Las formaciones a pie ocuparon solo 10 minutos, mientras que las formaciones de equipamiento terrestre y aéreo tomaron 25 minutos. Justo cuando esperabas ver llegar filas impecables y amenazantes, oleadas de acero blindado avanzaron con una presión palpable. Algunos quizá no estén acostumbrados a un desfile centrado en sistemas mecanizados, pero así es como debe presentarse, bajo el paradigma bélico actual, un ejército capaz de proteger la seguridad nacional y salvaguardar la paz mundial. Armas inteligentes y automatizadas y sistemas de información de espectro completo son esenciales para ganar las guerras modernas.
Desde el 4 de septiembre de 1839, cuando los colonizadores británicos iniciaron la Primera Guerra del Opio contra China, hasta el 2 de septiembre de 1945, cuando Japón firmó el acta de rendición—38.714 días—las potencias occidentales y los fascistas japoneses saquearon riquezas y masacraron inocentes en esta antigua tierra, infligiendo a la nación un dolor inmenso y duradero. Más de medio siglo después, el 3 de septiembre de 2025, por fin podemos decir que, en materia de armas y equipos, en gran medida hemos logrado el fortalecimiento autónomo de la defensa nacional. Ya sea sistemas integrados no tripulados de reconocimiento y ataque en aire, espacio y tierra, guerra electrónica, unidades de apoyo de información o apoyo logístico conjunto, hemos construido esencialmente un sistema de armamento adecuado al carácter actual de la guerra; y, mediante el misil estratégico intercontinental de combustible líquido DF‑5C, hemos establecido una capacidad de ataque nuclear global que permite una disuasión estratégica efectiva.
El mundo actual dista mucho de ser tranquilo. La humanidad vuelve a enfrentar elecciones entre paz y guerra, diálogo y confrontación, y beneficio mutuo o suma cero. Los bloques de Oriente y Occidente siguen enfrentados. La defensa nacional asegura un entorno pacífico para el desarrollo económico, y el crecimiento económico proporciona la financiación necesaria para la defensa. Este entorno relativamente estable y pacífico es vital para la economía; debemos concentrar toda nuestra energía en el desarrollo económico.
Publicado el: 3 de sep de 2025 · Modificado el: 6 de sep de 2025
